Aprendizaje de carrocero

Quería que mi aprendizaje se centrara en el automóvil como producto, así que empecé aquí como ingeniero mecatrónico. Sin embargo, pronto me di cuenta de que mi talento residía más en el material en bruto. El reto de volver a dejarlo como nuevo es algo con lo que me encuentro aquí todos los días.

Después de investigar en ferias y en Internet, siempre acababa aquí, así que lo solicité y ahora me gusta.

Muy agradables y simpáticos. Todos nos llevamos bien, podemos trabajar bien juntos y hablar entre nosotros sin formalidades.

Primero se encienden las luces y la radio. No se puede prescindir de la radio, te pone de mucho mejor humor. Luego mi compañero se reparte el trabajo y empezamos.

Sustituir el parachoques, cambiar una puerta o los paneles laterales. Simplemente todo lo que se puede romper en la carrocería de un coche en la vida cotidiana normal.

De momento, no. Aún estoy en mi primer año de formación y por ahora sólo me centro en eso.

La amabilidad, la atención y el espíritu de equipo, incluso fuera del trabajo. He aprendido a apreciar todo esto aún más desde que me di cuenta de que no se puede prescindir de ello en el taller.

Nuestro jefe ha comprado un coche clásico que quiere que restauremos. He ayudado a desmontar el coche clásico, pero aún no estoy preparado para trabajar de forma independiente y permanente. De vez en cuando me dejan soldar algo, pero el trabajo preciso lo hago junto con mi oficial. También queremos que tenga buen aspecto, ¡que vuelva a estar como nuevo!

Voy a la escuela de formación profesional una vez a la semana. Se trata de estudios sociales y del campo del aprendizaje. En el campo del aprendizaje, la teoría de la vida laboral cotidiana se divide en 12 áreas temáticas, que luego repasamos paso a paso.

Me informé específicamente sobre las carreras en el sector del automóvil. Al principio quería ser técnico en mecatrónica de vehículos de motor, pero las plazas en CSB Schimmel ya estaban ocupadas. Entonces me ofrecieron un aprendizaje como chapista y acepté tras informarme mejor.

La empresa me llamó inmediatamente la atención en una feria de formación. Me gustó a primera vista. Los empleados de la feria parecían simpáticos y eran muy amables y abiertos. Eso me gustó.

Trabajar aquí me resulta muy agradable. Hay un ambiente agradable en todos los departamentos. La gente siempre se saluda con una sonrisa amable y todo el mundo se ayuda. Eso lo hace divertido.

Primero ficho, luego me cambio. Sólo entonces empezamos de verdad. Se encienden las luces en todas partes y se preparan los primeros trabajos.

Reparo las piezas rotas, sobre todo los parachoques, pero también hay que cambiar a menudo los enganches de los remolques y los capós.

Todavía no tengo ninguna idea concreta para especializarme o seguir formándome, acabo de empezar, pero el sector de los coches clásicos sería digno de consideración.

La amabilidad se respira en toda la empresa. Y la armonía aquí en el taller. Todos nos llevamos bien. Nadie es marginado ni desfavorecido, lo que me gusta especialmente.

Nuestro jefe compró el coche clásico Mitsubishi a un museo hace unos meses. Ahora tenemos que restaurarlo y reacondicionarlo. Mi colega Renee y yo estamos desmontando completamente el interior para llegar a los daños ocultos de la carrocería, que luego repararemos.

Una vez al mes, voy a la escuela de formación profesional durante una semana, más un día extra. En estudios sociales, aprendo todo sobre nóminas, celebración de contratos, toda la burocracia. Mi segunda asignatura, campo de aprendizaje, trata de mi trabajo. Aprendo los fundamentos teóricos y cómo manejar correctamente todas las piezas del coche.